TVT | Redacción digital
La Fiscalía General de la República (FGR) transfirió las instalaciones del Centro Nacional de Arraigo al gobierno de Morelos para reducir la sobrepoblación penitencia en la entidad. 804 internos de alta peligrosidad serán canalizados.
Como testigo del convenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que la federación ayudará a mejorar las instalaciones, proyecto estimado en 200 millones de pesos.
Afirmó que lo ideal sería no tener cárceles o irlas convirtiendo en escuelas, pero en tanto “no logremos una sociedad mejor, el ideal es que podamos lograr la paz y la tranquilidad en nuestro país, que no haya violencia” y tienen que ver, agregó, con atender los origines de la violencia. “Si cambiamos las circunstancias, podemos formar a buenos ciudadanos”, subrayó.
Tras resaltar que heredó un sistema penitenciario en crisis y en completo abandono por la omisión de administraciones pasadas, el gobernador Cuauhtémoc Blanco destacó una marcada sobrepoblación en centros de readaptación social, donde conviven personas “en su mayoría de alta peligrosidad “pertenecientes a grupos delictivos muy violentos”. El mandatario resaltó que en lo que va de su administración “hemos logrado anular a siete de los 10 objetivos delincuenciales que nos marcamos en prioridad”.
El presidente López Obrador destacó que la sobrepobación en cárceles de Morelos es de 20 por ciento. “Por razones de seguridad, pero también humanitarias tenemos que garantizar que los presos tengan condiciones mínimas para cumplir con sus condenas.
Dijo que las celdas del nuevo centro de reclusión cuentan con un sistema “bastante moderno de vigilancia con cámaras, con comodidades para los familiares, que puedan venir a visitar a los reclusos”.
López Obrador afirmó que llevará tiempo lograr una sociedad mejor, pero el propósito es que “nadie se vea orillado, a tomar el camino de las conductas antisociales”.
Resaltó que cuenta con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública y de las Fuerzas Armadas. La Secretaría de Marina , recordó, ayuda a poner orden en costas, litorales y puertos, y la amenaza en estos últimos -al referirse al de Manzanillo, Colima- era “plata o plomo, era corrupción o muerte. Para eso se necesitaba que nos ayudara para enfrentar ese desafío la Secretaría de Marina”.
En el caso de la Secretaría de la Defensa Nacional, mencionó que ayudó en la formación de la Guardia Nacional y “es una institución que vamos a defender, que vamos a cuidar, porque se necesita. Desde que llegué a la Presidencia me han respaldado con lealtad, tanto marinos como soldados”.
Destacó que soldados y marinos pueden ayudar para garantizar la seguridad pública.
Señaló que otra institución que apoya es la Fiscalía General de la República, que ahora actúa con autonomía, y también mencionó el Poder Judicial, “con quien tenemos buenas relaciones, sobre todo con los ministros de la Suprema Corte de Justicia y en particular con el (ministro) presidente. Hay asuntos de Estado en los que estamos trabajando de manera coordinada”.
Mencionó que se requiere remodelar la infraestructura infraestructura.
En dos actos posteriores -programa nacional de reconstrucción y de mejoramiento urbano- el presidente reiteró que la transformación va adelante pese a la oposición de conservadores ante manifestaciones en su contra de un pequeño grupo de integrantes de Frenaa.
“Hay tanto ruido porque la transformación va hacia adelante. No vamos a dar un paso atrás, ya que se despidan los conservadores. No va haber gobiernos corruptos, inhumanos. Ya el gobierno dijo basta y se echó a andar la transformación de Mexico”, señaló en el Palacio de Cortés.
“Venimos de la lucha abajo, estamos acostumbrados a luchar en las calles; no es para nosotros nada extraño estar enfrentando una oposición. Parafraseando a Ponciano Arriaga, “entre más me golpean y más gritan, más digno me siento. Es un honor estar encabezando esta transformación en Morelia y el gobierno de México”.
Luego, en los patios de la Antigua estación de ferrocarriles, señaló que no se seguirá sobornando a líderes que engañan al pueblo… Vamos a seguir adelante, aunque no les guste a los conservadores”.
En el Palacio de Cortés, Cuauhtémoc Blanco le expresó al presidente: “la gente del PAN, del PRI, siempre han querido desestabilizar su gobierno y, como siempre se lo he dicho, estamos con usted hasta la muerte”.
Al final de este acto, una mujer en favor del gobierno empujó a uno de los integrantes de Frenaa y otros persiguieron por varias calles a otros que lanzaron consignas contra el presidente.
Fuente: La Jornada