Un partido de la primera división del futbol chileno que se jugaba en Santiago en el reinicio del torneo local fue suspendido el viernes después de que un grupo de encapuchados ingresó al estadio de manera violenta.
Dirigentes locales esperaban que la actividad futbolística pudiera retomarse a partir de este viernes, pero las “barras bravas” de los equipos más grandes se oponen a su reinicio. El partido entre Unión La Calera y Deportes Iquique se jugaba en el estadio La Florida, en el suroriente de Santiago.
Después de los incidentes, en que encapuchados llegaron incluso hasta la cancha forzando a los jugadores a resguardarse en los vestuarios, el sindicato de futbolistas llamó a suspender todos los partidos.
Sin embargo, la jornada continuó jugándose poco después con el encuentro entre Cobresal y Unión Española, en la norteña ciudad de El Salvador.
El sábado está previsto que juegue Colo Colo, el equipo más popular del país, en el estadio Monumental de Santiago, mientras que para el domingo está programado el encuentro entre Universidad de Chile, otro de los clubes grandes, y Huachipato en la sureña ciudad de Talcahuano.
Cabe recordar que las movilizaciones sociales en Chile, las mayores desde el retorno a la democracia hace casi 30 años, han dejado más de 20 muertos, miles de heridos y detenidos.
Fuente: El Universal