En menos de un mes, la canciller alemana, Angela Merkel, ha sufrido en tres ocasiones de temblores incontrolados en manos y brazos. El más reciente de ellos ocurrió durante un desfile militar en el que se le daba la recepción al primer ministro finlandés, Antti Rinne, en Berlín.
La mandataria sufrió convulsiones durante un tiempo prolongado, mientras se interpretaban los himnos nacionales, pero que el incidente no ha sido tan marcado como en los casos anteriores.
La preocupación en la opinión pública alemana por la salud de Merkel, que el próximo día 17 cumplirá 65 años, es ya latente. Sin embargo, la mandataria alemana desmintió estar enferma y que no presenta problemas para mantenerse en el poder.