TVT | Redacción
Aunque para mañana domingo 27 de octubre, se prevé la disminución de las precipitaciones pluviales ante el paso del Frente frío número 7, se mantendrá el monitoreo meteorológico por la llegada de una nueva Onda tropical a partir de la próxima semana, informó el Instituto de Protección Civil del Estado de Tabasco (IPCET).
En prevención de los estragos que pudieran ocasionar esos fenómenos hidrometeorológicos, desde la tarde noche de este viernes, por instrucciones del gobernador Adán Augusto López Hernández, se instaló de forma permanente el Centro Estatal de Operaciones (CEO) del Sistema Estatal de Protección Civil (SEPC).
Dicho Centro Estatal de Operaciones, instalado la tarde noche de ayer, coordinará y atenderá con prontitud cualquier emergencia provocada por la entrada y desarrollo del Frente frío número 7 en territorio tabasqueño, así como los estragos que pudiera provocar la llegada de una nueva Onda tropical, prevista para la semana entrante.
En el CEO del SEPC, participan 31 dependencias estatales y federales que mantendrán un monitoreo puntual, las 24 horas del día, para brindar –de ser necesario—apoyo inmediato a la población ante el pronóstico de lluvias intensas de 75 a 150 milímetros, con probables torrenciales aislados de 150 a 250 milímetros para este fin de semana.
En 12 comisiones participan representantes de la Secretaría de Gobierno, el Instituto de Protección Civil del Estado de Tabasco (IPCET), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), la 30 Zona Militar, V Zona Naval y Guardia Nacional; así como de la Secretaría de Ordenamiento Territorio y Obras Públicas (SOTOP), la Secretaría de Salud, el Sistema DIF Tabasco, la Secretaría de Movilidad, la Secretaría de Bienestar y Cambio Climático, y la Unidad de Información del Ejecutivo.
Los grupos de trabajo tienen entre otras responsabilidades, socorrer de manera inmediata a la población durante el tiempo que dure la emergencia, búsqueda y rescate, evaluación de daños y continuidad de servicios, la instalación de refugios temporales, atención médica, y de ser necesario, gestionar la ayuda humanitaria necesaria.
En una reunión de trabajo previa, en la participaron autoridades la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS), el coordinador estatal de Protección Civil, Jorge Mier y Terán aseguró que hay plena coordinación entre todas las instancias de gobierno, por lo que se encuentran preparados para enfrentar cualquier eventualidad.
De la misma forma, llamó a la población a extremar precauciones, principalmente aquellas que se asientan en zonas bajas, laderas de los ríos y cerros, así como a colaborar con las autoridades, no sacar la basura a la calle y realizar servicios de limpia y recolección de manera puntual en el frente de sus casas, para evitar la obstrucción del sistema de alcantarillado y drenaje.
Luego de delinear acciones de coordinación y prevención para evitar mayores afectaciones, el funcionario estatal exhortó también a los titulares de las Unidades Municipales de Protección Civil a mantener monitoreo constante en las comunidades, particularmente en las zonas vulnerables a encharcamientos e inundación, y ante la probable caída de árboles y desprendimiento de láminas.
Como parte de los preparativos, se informó que el Sistema Estatal de Protección Civil cuenta con cerca de 600 elementos operativos de apoyo a la población; se han instalado 17 bombas en zonas susceptibles a anegación; mientras que representantes de la CFE dieron a conocer que tienen preparadas 16 cuadrillas y 24 en espera para atender fallas en el servicio de energía eléctrica.
En la sesión, el físico meteorólogo de la CONAGUA, Gerardo Alarcón Ferreira, detalló que el Frente frío número 7 tendrá mayor influencia en la subregión de la Sierra, zona Centro y Chontalpa, sin descartar lluvias menores en el resto de la entidad tabasqueña.
Para el domingo 27 de octubre, se prevén la disminución de las precipitaciones ante el paso del frente, sin embargo, se mantendrá monitoreo meteorológico por la llegada de una nueva onda tropical a partir de la próxima semana.