TVT | Redacción
Tres años y medio después de que los británicos votaran a favor de salir de la Unión Europea (UE), los eurodiputados ratificaron ayer el acuerdo sellando el primer divorcio en la historia del bloque, en una sesión marcada por las lágrimas y las despedidas.
Por 621 votos a favor, 49 en contra y 13 abstenciones, la Eurocámara aprobó una salida ordenada de Reino Unido que seguirá respetando las reglas europeas durante un período de transición hasta finales de año.
El debate se prolongó durante casi dos horas en las que se cruzaron las celebraciones de los partidarios de la marcha, sentados al fondo del hemiciclo, con las lágrimas y la emoción de los británicos que hablaban en el pleno por última vez, algunos de ellos con ropa azul y amarilla en homenaje a la bandera de la UE.
Los diputados del grupo liberal llevaron la iniciativa de lanzarse a cantar el poema escocés “Auld Lang Syne“, usado tradicionalmente en Nochevieja para despedir el año, pero también en funerales, una canción que habla de la amistad y de “los viejos tiempos”.
Antes del debate, socialdemócratas, liberales y verdes celebraron sus propias reuniones de despedida de sus compañeros y durante el debate se sucedieron discursos que apelaron a esa amistad entre ambos bloques.
Tras prolongadas discusiones de divorcio, Londres dejará a media noche del viernes el club al que se unió en 1973. Las banderas británicas se retirarán de las oficinas de la UE y se arriará la bandera de la UE en los departamentos británicos.
Aunque ya no será un Estado miembro, seguirá vinculado a las normas europeas durante el periodo de transición, 11 meses donde negociadores diseñarán la relación futura.
En esas conversaciones se incluirá el acuerdo de comercio entre ambos, unas negociaciones que se prevén complejas y para las que, según ha advertido ya el bloque europeo, harán falta más de los 11 meses que le quedan a los británicos alineados con la normativa europea.
Escocia, un problema
El Parlamento escocés votó ayer a favor de convocar a un nuevo referendo sobre dicha independencia, una medida para presionar al primer ministro británico, Boris Johnson.
Los legisladores en Edimburgo votaron 64-54 a favor de un referendo “para que el pueblo de Escocia pueda decidir si quieren convertirse en un país independiente”.
Fuente: El Heraldo de México