TVT | Redacción digital

El presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó a los directivos del ISSSTE que le presenten un plan de rescate de la institución, “que ha sido saqueada” desde hace mucho tiempo, porque “todo estaba subrogado” y garantizó que les apoyará con los recursos económicos que se necesiten para mejorar sustancialmente los servicios” médicos para los trabajadores al servicio del Estado”.

Es muy claro, le planteó al director general del instituto, Luis Antonio Ramírez Pineda; al director normativo, Ramiro López Elizalde, y al titular de la dirección de Administración de Finanzas, general Pedro Lohmann Iturburu, “pónganse de acuerdo para rescatar al ISSSTE, esa es la misión.

“Yo voy a respaldar, no les van a faltar los recursos, todo lo que se necesite para rehabilitar las clínicas, para contratar personas, para que haya medicamentos, tengan equipos y mejore sustancialmente esta institución”, cuyo servicio médico, sin temor a equivocarme, fue el más abandonado, “y lo es todavía”, consideró.

Al supervisar la remodelación y ampliación de la Clínica-Hospital ISSSTE de esta ciudad, tras un largo tiempo de abandono, reconoció que no se ha avanzado ni quisiera en mejorar los servicios sanitarios, uno de los “saldos negativos de la política neoliberal” porque se presentó la pandemia de Covid-19 y “tuvimos que llevar a cabo un programa emergente para atender a los afectados”.

Recordó que al asumir la Presidencia, encontraron “un tiradero de obras inconclusas de todo tipo: carreteras, puentes, trenes, universidades, y muchas unidades médicas, centros de salud y hospitales”, porque no se tenía interés realmente en dar un buen servicio a los mexicanos.

“De manera especial estaba por los suelos el sistema de salud pública; muy mal los hospitales de la Secretaría de Salud y en los estados; muy mal los hospitales, el servicio en el Seguro Social y muy mal los servicios en el ISSSTE.

Resaltó su objetivo ce contar con un buen sistema de salud, “de los mejores del mundo” antes de que finalice su sexenio y “vamos avanzando en ese sentido”, combatiendo la “peste de la corrupción”.


López Obrador reconoció que “ha costado mucho, por ejemplo, resolver el problema del abasto de los medicamentos porque era un gran negocio de unos cuantos. Estemos hablando de la compra de alrededor de cien mil millones de pesos en medicinas y unas cuantas empresas, laboratorios, sobre todo distribuidores con influencias políticas eran los que vendían estos medicamentos y por lo general no había abasto de medicamentos. Incluso se adulteraban los medicamentos. Una gran corrupción.

“Cómo estarían de enraizados esos intereses, que todavía estamos enfrentado bloqueos, chantajes de estas empresas que antes abastecían de medicamentos. Todavía están en una campaña contra el gobierno porque tomamos la decisión de ya no comprarles a ellos los medicamentos”.

En este marco, destacó que “hace poco sucedió un caso bastante raro, de que se compraron medicamentos para niñas, niños con cáncer y se robaron todos; se están encontrando tirados en la basura, (porque) lo que buscaban era poner en evidencia al gobierno, pero como es de dominio público nosotros somos muy perseverantes, no nos rendimos y hemos decidido acabar con la corrupción”, enfrentando todos los embates.

Mencionó que en el ISSTE “todo estaba subrogado, fue excesivo”. Es decir, se han subrogado servicios, como en el IMSS –puso como ejemplo la tragedia de la guardería ABC, precisamente por subrogar esos servicios del Seguro social a particulares”, pero en el caso del ISSSTE, añadió, “fue excesivo, todo estaba subrogado, casi todo se privatizó, de modo que vamos a rescatarlo”.

Fuente: La Jornada