Plácido Domingo actuará en el Festival de Salzburgo el domingo, su primera presentación desde que nueve mujeres lo acusaron de acoso sexual en un reportaje difundido por The Associated Press.

El caso ha dividido el mundo de la ópera. Dos teatros estadunidenses inmediatamente cancelaron las presentaciones que tenían programadas con Domingo. Casas de ópera europeas hasta ahora han confirmado presentaciones hasta noviembre de 2020, en lo que algunos ven como una labor para frenar los juicios apresurados que se perciben en el movimiento en redes sociales #MeToo (Yo También), sobre denuncias de acoso.

Domingo, de 78 años de edad y quien se ha hecho famoso como tenor, cantará el domingo el rol de Miller, un barítono, en “Luisa Miller”.

El cantante ha recibido un apoyo firme del festival, así como de sus acompañantes en el evento. En unas fotografías publicadas en Instagram hace pocos días, aparece sonriendo junto a Nino Machaidze y Piotr Beczala, y el director James Conlon.

La historia de la AP publicada la semana pasada detalló exhaustivas acusaciones de acoso sexual de nueve mujeres contra Domingo, las cuales abarcaron varias décadas empezando por la de 1980. Las mujeres acusaron a Domingo de abusar de su poder en la Ópera de Los Ángeles, donde ha sido director general desde hace tiempo, y en otros sitios para forzarlas a sostener relaciones sexuales con él.

Varias mujeres dijeron que les ofrecía empleo y en algunas ocasiones las castigaba a nivel profesional si rechazaban los avances de Domingo. Las acusaciones incluían varias llamadas telefónicas, invitaciones a cuartos de hotel y a su apartamento, además de besos y contacto físico indeseados.

En un comunicado enviado a la AP, Domingo dijo que las acusaciones eran “profundamente perturbadoras y, así como se las presenta, incorrectas”. Señaló que creía que sus interacciones con las mujeres eran consensuales. Desde la publicación de la nota, él no ha vuelto a hablar públicamente del asunto.

Hace unos días, la escritora de temas culturales Hedwig Kainberger escribió en el medio Salzburger Nachrichten que no había ninguna razón para que Domingo estuviera en el festival. Señaló que él nunca ha tenido el tipo de poder político en el festival de Salzburgo que tiene en otras casas de ópera estadounidenses.

Fuente: La Jornada