TVT | Redacción digital
Estados Unidos es el número uno en el mundo, como siempre quiere ser, pero en esta ocasión por el número total de casos confirmados de Covid-19.
Al mismo tiempo, marcó récord con la cantidad más alta jamás vista de nuevos desempleados, mientras Washington está por aprobar el paquete de rescate económico más cuantioso de su historia.
El país superó a China como la nación con más casos de coronavirus en el mundo, con más de 82 mil 404, cifra que alcanzó en poco más de seis semanas (el primer o fue detectado en el estado de Washington el 21 de enero). Y también ya superó mil muertos por Covid-19.
El estado de Nueva York continúa como epicentro de la pandemia en el país, con casi la mitad de casos a escala nacional, y algunos hospitales ya están abrumados. El número de pacientes internados se disparó 40 por ciento en un día, informó ayer el gobernador Andrew Cuomo.
El buque-hospital de la marina estadunidense, Comfort, zarpará de Virginia para llegar al puerto de la ciudad de Nueva York, el más golpeado por la pandemia, el próximo lunes y ofrecerá mil camas más. Autoridades federales indicaron que las zonas metropolitanas de Nueva Orleans, Chicago y Detroit empiezan a ser consideradas focos rojos.
Un número récord, 3 millones 280 mil trabajadores, se registró para seguros de desempleo en una sola semana, otro indicador de la devastación económica provocada por la pandemia y el pésimo manejo de la crisis del gobierno federal. Este hecho marca el fin del auge económico de más de una década (aunque marcado por mayor desigualdad en décadas) que había reducido la tasa de desempleo a 3.5 por ciento en febrero.
Sin embargo, esto apenas empieza. Algunos pronósticos indican que el desplome económico podría disparar la tasa de desempleo entre 13 y 20 por ciento en los próximos meses –peor que en todas las recesiones desde la Gran Depresión.
Más aún, dado que aproximadamente la mitad de trabajadores tienen seguros de salud sólo por medio de su empleo –este país es casi el único entre los avanzados que carece de un sistema de salud de acceso universal–, millones podrían quedar desamparados justo en medio de la pandemia.
En este contexto, el Congreso está por aprobar (el Senado lo hizo de manera unánime la noche del miércoles y la Cámara de Representantes lo avalará este viernes) el paquete de rescate económico más grande en la historia del país, de aproximadamente 2 billones de dólares (equivalente a 10 por ciento del PIB nacional), y el presidente Donald Trump lo promulgará.
El paquete incluye una ampliación de los beneficios de desempleo, un pago directo a casi todo estadunidense de hasta mil 200 dólares, un fondo de apoyo para pequeños negocios y otro para grandes empresas, además de financiamiento de emergencia a gobiernos estatales, hospitales y otros proveedores de servicios de salud. La crisis es de tal magnitud que aun antes de promulgarse la iniciativa, todos suponen que no será la última.
Con la noticia del rescate, la Bolsa de Valores resucitó y en los tres días recientes marcó sus mejores incrementos en décadas.
Entre los sectores más golpeados, junto con las aerolíneas y los hoteles, está el de los restaurantes. Seis chefs y propietarios de establecimientos de prestigio escribieron un artículo de opinión en The New York Times.
En el texto afirman que los restaurantes independientes necesitan asistencia de emergencia con el fin de proteger a sus más de 10 millones de empleados, cuyos trabajos están en peligro de desaparecer para siempre. Y también serán afectados otros cientos de millones de empleados (granjeros, empacadores, transportistas, lavanderos, importadores y contadores) que dependen de esos establecimientos, argumentan. Calculan que sin apoyo, 75 por ciento de los restaurantes a escala nacional no reabrirán.
Se trata de los restaurantes, entre otros sectores de servicios, que dan empleo a inmigrantes, y las consecuencias no sólo se sentirán dentro de este país.
Un nuevo análisis por el Diálogo Interamericano, calcula que el efecto potencial del Covid-19 en Estados Unidos será la reducción de por lo menos 3 por ciento en las remesas a América Latina, unos 2 mil millones de dólares menos en 2020 comparado con el 2019, según https://www.thedialogue.org/wp-content/uploads/2020/03/Migration-remittances-and-the-impact-of-the-pandemic-2.pdf.
Fuente: La Jornada